CMMI – Integración de modelos de madurez de capacidades.

CMMI es el modelo de buenas prácticas de Capacidad y Madurez Integrado (Capability maturity model integration) es el sucesor de CMM. Fue desarrollado desde 1987 hasta 1997, con el objetivo de realizar algunas mejoras respecto al SW-CMM e integrarlo con el SE-CMM y el IPD-CMM, que pasaban a ser considerados como «obsoletos».

Fue creado por miembros de la industria, el gobierno y el Instituto de Ingeniería de Software (Software Engineering Institute – SEI). Se lanzó la primera versión al mercado en 2002.

El objetivo del proyecto CMMI es mejorar la usabilidad de modelos de madurez integrando un conjunto de modelos orientados a la mejora de procesos de ingeniería del software, ingeniería de sistemas, desarrollo de productos y adquisición de aplicaciones ya existentes en un solo marco (framework).

Es un modelo que permite clasificar a las organizaciones de desarrollo de software según una escala de cinco niveles de madurez y capacidad. La clasificación en un determinado nivel se realiza sobre la base del dominio y aplicación que una organización evidencia tener acerca de las áreas de proceso de dicho nivel, lo cual refleja el grado de madurez de la misma y de los procesos que sigue para desarrollar software.

CMMI es uno de los modelos más conocido y empleado a nivel mundial, convertido en un estándar de facto, en lo referente a la Mejora de Procesos Software.

Existen cuatro diferentes disciplinas del Modelo CMMI, con el objetivo de cubrir diferentes necesidades dentro de las Organizaciones (Desarrollo de Software, Servicios, Outsourcing y Adquisición de Productos). Estas cuatro disciplinas son:

  • CMMI-SW: Software.
  • CMMI-SE/SW: + Ingeniería de sistemas.
  • CMMI-SE/SW/IPPD: + Desarrollo integrado de procesos y productos.
  • CMMI-SE/SW/IPPD/SS: + Gestión de proveedores.
  • CMMI proporciona una visión completa y estructurada para la mejora de los procesos que intervienen en el desarrollo y mantenimiento de software.

 

BENEFICIOS IMPLANTACIÓN CMMI.

  • Mejora del alineamiento del software con la Estrategia de Negocio al integrar bajo una visión los sistemas, los procesos, las personas y la tecnología lo cual permite tener las tecnologías alineadas lo cual define los servicios y funciones de TIC aportando el máximo valor exigido.
  • Reducción en los costes y en las desviaciones en plazo de los «Proyectos software» al proveer un conocimiento y administración de los requerimientos.
  • Mayor eficacia en la detección de errores a lo largo del ciclo de vida de los «Proyectos software«, reduciendo drásticamente el número de errores que afecta directamente a los clientes y usuarios, al proveer un conocimiento y administración de los riesgos y de exigencias de calidad.
  • Resultados más predecibles en los proyectos al proveer conocimiento y administración de la información relevante al proyecto, del equipo y de las exigencias de los clientes.
  • Implementación de técnicas pro-activas de gestión, mitigando los riesgos que afectan a los proyectos.
  • Liberación de tensiones, malentendidos y vacíos de responsabilidad en «Proyectos software» al proveer mecanismos de control de conflictos de manera reactiva y proactiva.
  • Disposición de información de gestión útil a la hora de tomar decisiones ya sean éstas relacionadas con la Gestión de «Proyectos software«, bien con la mejora continua del «Proceso software«.
  • Mejorar el posicionamiento frente al mercado al tener información interna alineada con los objetivos estratégicos y por ende en consonancia con información externa.

 

Estructura de base y componentes del modelo CMMI.

El modelo está compuesto de cinco elementos que se describen a continuación.

  • Área de proceso (Process Area). Un área de proceso es un grupo de prácticas relacionadas con una tarea específica para conseguir un conjunto de objetivos. Al ejecutarlas en conjunto se satisface una meta importante como mejora significativa en esa área. Las áreas de proceso distinguen los distintos niveles de madurez del modelo CMMI.
  • Metas específicas (Specific Goals). Las metas específicas se aplican o definen sobre un área de proceso y se ocupan de describir las características únicas que deben ser implementadas para satisfacer el área de proceso.
  • Prácticas específicas (Specific Practices). Una práctica específica es una actividad considerada como importante para lograr la meta específica a la cual está asociado en un determinado área de proceso. Las prácticas específicas y las genéricas consideran subprácticas, que son interpretaciones y descripciones detalladas de las prácticas, y que resultan útiles para la mejora del proceso.
  • Características comunes (Common Features). Son características que se observan de manera general en las distintas áreas de proceso, organizadas en las prácticas genéricas. Hay cuatro características comunes principales:
  1. Compromiso a realizar.
  2. Habilidad a realizar.
  3. Administración de la implementación.
  4. Verificación de la implementación.
  • Metas Genéricas (Generic Goals). Metas que se denominan genéricas debido a que aparecen en varias áreas de proceso. El logro de una meta genérica en un proceso significa control mejorado en planeación e implementación de los procesos asociados con el área de proceso.
  • Prácticas Genéricas (Generic Practices). Las prácticas genéricas buscan la institucionalización para asegurar que los procesos asociados al área de proceso sean eficaces, reutilizables y durables. Las prácticas genéricas son categorizadas por las metas genéricas y las características comunes.
Componentes del Modelo CMMI.

Componentes del Modelo CMMI.

 

Las organizaciones no pueden ser certificadas CMMI. Las organizaciones son evaluadas y recibe una calificación de nivel 1-5 si sigue los niveles de Madurez. En caso de que quiera la organización, puede coger áreas de proceso y en vez de por niveles de madurez puede obtener los niveles de capacidad en cada una de las Áreas de Proceso, obteniendo el «Perfil de Capacidad» de la Organización.

Representaciones.

Representación continua – Nivel de capacidad.

La representación continua se focaliza en la mejora de un proceso o un conjunto de ellos relacionado(s) estrechamente a un área de proceso en que una organización desea mejorar, por lo tanto una organización puede ser certificada para un área de proceso en cierto nivel de capacidad. Existen seis niveles de capacidad por donde transitan los procesos asociados a un área de proceso y cada nivel es construido sobre el nivel anterior, es decir para que un proceso alcance un nivel de capacidad necesariamente debe haber alcanzado el nivel anterior.

Nivel 0 – Incompleto: Un proceso es denominado «proceso incompleto» cuando una o más objetivos específicos del área de proceso no son satisfechos.

Nivel 1 – Realizado: Un proceso es denominado «proceso realizado» cuando satisface todos los objetivos específicos del área de proceso. Soporta y permite el trabajo necesario para producir artefactos.

Nivel 2 – Manejado: Un proceso es denominado como «proceso manejado» cuando tiene la infraestructura base para apoyar el proceso. El proceso es planeado y ejecutado en concordancia con la política, emplea gente calificada los cuales tienen recursos adecuados para producir salidas controladas; involucra partes interesadas; es monitoreado, controlado y revisado; y es evaluado según la descripción del proceso.

Nivel 3 – Definido: Un proceso denominado «proceso definido» es adaptado desde el conjunto de procesos estándares de la organización de acuerdo a las guías de adaptación de la organización, y aporta artefactos, medidas, y otra información de mejora a los activos organizacionales.

Nivel 4 – Manejado cuantitativamente: Un proceso denominado «proceso manejado cuantitativamente» es controlado usando técnicas estadísticas y otras técnicas cuantitativas. Objetivos cuantitativos para la calidad y realización del proceso son establecidos y usados como criterios para manejar el proceso.

Nivel 5 – Optimización: Un proceso denominado «proceso optimización» es mejorado basado en el entendimiento de causas comunes de variación del proceso. Un proceso en optimización se focaliza en la mejora continua del proceso realizado a través de mejoras incrementales y usando innovación tecnológica.

Representación escalonada – Niveles de madurez.

En la representación escalonada o por etapas se ofrece un método estructurado y sistemático de mejoramiento de procesos, que implica mejorar por etapas o niveles. Al alcanzar un nivel, la organización se asegura de contar con una infraestructura robusta en términos de procesos para optar a alcanzar el nivel siguiente. Por lo tanto es una organización la que puede ser certificada bajo un nivel, en este caso llamado nivel de madurez. Según esta representación un nivel de madurez está compuesto por áreas de procesos, en donde los objetivos asociados a ese nivel deben ser cumplidos para que la organización pueda certificarse en aquel nivel de madurez. Hay cinco niveles de madurez, los que son descritos a continuación.

Nivel 1 – Iniciado: La organización usualmente no provee un ambiente estable para soportar los procesos. Éxitos en estas organizaciones se debe a la competencia y esfuerzos heroicos de la gente dentro de la organización y no al uso de procesos probados. A pesar de este caos, organizaciones pertenecientes al nivel de madurez 1 con frecuencia producen productos y servicios que funcionan; sin embargo, ellos frecuentemente exceden sus presupuestos y no cumplen sus planes.

Estas organizaciones son caracterizadas por la tendencia a no cumplir sus compromisos, al abandono de procesos durante tiempos de crisis, y a la incapacidad para repetir sus éxitos.

El Nivel 1 está caracterizado además por la realización de trabajo redundante, por personas que no comparten sus métodos de trabajo a lo largo de la organización y cuando una persona clave en un área de negocio específica dentro de la organización se marcha, su conocimiento se va con ella y se pierde para la organización. Es claro que el Nivel 1 es uno donde ninguna organización quiere estar y donde por lo general la mayoría que no tiene sus procesos definidos se encuentra.

Nivel 2 – Manejado: En el nivel 2 las organizaciones se enfocan en tareas cotidianas referentes a la administración. Cada proyecto de la organización cuenta con una serie de procesos para llevarlo a cabo, los cuales son planeados y ejecutados de acuerdo con políticas establecidas; los proyectos utilizan gente capacitada quienes disponen de recursos para producir salidas controladas; se involucran a las partes interesadas; son monitoreados, controlados y revisados; y son evaluados según la descripción del proceso.

La disciplina del proceso reflejada por el nivel de madurez 2 ayuda a asegurar que existen prácticas y los proyectos son realizados y manejados de acuerdo a los planes documentados.

En el nivel de madurez 2 el estado de los artefactos y la entrega de los servicios siguen planes definidos. Acuerdos son establecidos entre partes interesadas y son revisados cuando sea necesario. Los artefactos y servicios son apropiadamente controlados. Estos además satisfacen sus descripciones especificadas, estándares, y procedimientos.

Nivel 3 – Definido: En el nivel de madurez 3, los procesos son caracterizados y entendidos de buena forma, y son descritos en estándares, procedimientos, herramientas, y métodos. El conjunto de procesos estándares de la organización, los cuales son la base para el nivel de madurez 3, es establecido y mejorado continuamente. Estos procesos estándares son usados para establecer consistencia a través de la organización. Los proyectos establecen sus procesos adaptando el conjunto de procesos estándares de la organización de acuerdo a guías de adaptación.

Una diferencia importante entre el nivel 2 y 3 es el alcance de los estándares: la descripción de procesos y los procedimientos. En el nivel de madurez 2, los estándares pueden ser un poco diferentes en cada instancia específica del proceso (por ejemplo sobre un proyecto particular). En el nivel de madurez 3, los estándares, descripción de procesos y procedimientos para un proyecto, son adaptados desde un conjunto de procesos estándares de la organización a un particular proyecto o unidad organizacional y así son más consistentes.

Otra distinción crítica es que el nivel de madurez 3, los procesos son típicamente descritos más rigurosamente que en el nivel 2. Un proceso definido claramente plantea el propósito, entradas, criterios de entrada, actividades, roles, medidas, pasos de verificación, salidas y criterios de salida. En el nivel de madurez 3, procesos son manejados más proactivamente entendiendo las interrelaciones de las actividades y medidas detalladas del proceso, sus artefactos y sus servicios.

Nivel 4 – Manejado cuantitativamente: En el nivel de madurez 4, la organización y proyectos establecen objetivos cuantitativos para medir la calidad y realización de los procesos y los usa como criterios en el manejo de ellos. Los objetivos cuantitativos son definidos en base a las necesidades de clientes, usuarios finales, organización, y actores de los procesos. La calidad y realización de procesos son entendidos en términos estadísticos y son manejados durante todo el ciclo de vida del proceso.

Para subprocesos seleccionados, se recolectan y analizan estadísticamente medidas sobre la realización de procesos. Estas métricas son incorporadas en el repositorio de métricas de la organización para apoyar la toma de decisiones. Causas especiales de variación de procesos son identificadas y, cuando sea necesario, las fuentes de estas causas son corregidas para prevenir futuras ocurrencias.

Una diferencia importante entre los niveles 3 y 4 es la capacidad de predicción de la realización del proceso. En el nivel de madurez 4, la realización de procesos es controlada usando técnicas estadísticas y cuantitativas, y el proceso es cuantitativamente predecible, en cambio en el nivel de madurez 3 la realización del proceso es sólo predecible cualitativamente.

Nivel 5 – Optimizado: En el nivel de madurez 5, una organización mejora continuamente sus procesos basándose en el conocimiento de las causas comunes de variación inherente en los procesos. El nivel de madurez 5 se focaliza sobre la mejora continua de los procesos a través de mejoras continuas, incrementales y tecnológicas. Los objetivos de mejora cuantitativa de procesos para la organización son establecidos, continuamente revisados para reflejar cambios en los objetivos del negocio y usados como criterio en la mejora de procesos. Los efectos del empleo de las mejoras de procesos son medidos y evaluados contra los objetivos de mejora cuantitativa del proceso.

Una diferencia importante entre el nivel de madurez 4 y 5 es el enfoque de la variación de los procesos. En el nivel de madurez 4, la organización está orientada a encontrar causas especiales de variación y proveer una predicción estadística de los resultados. Sin embargo, los resultados pueden ser insuficientes para alcanzar los objetivos establecidos. En el nivel de madurez 5 la organización está enfocada en las causas comunes de variación de procesos y modificar los procesos afectados para mejorar la realización de ellos y alcanzar los objetivos cuantitativos de mejora de procesos.

 

Saludos.

Acerca de tihuilo
Estudiante de Ing. en Sistemas y Computación

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